“Desde el equipo del primer presidente se percibía que Mujica tenía un marcado desprecio por las normas, la academia y los intelectuales” afirma el libro para explicar la “poco amigable” transición de gobierno que ocurrió finalizada la gestión de Mujica.
“Además de desorden, dejó 60.000 funcionarios nuevos en 'una especie de alegre populismo'” agrega sobre Mujica.
Milton Romani, exjerarca que trabajó para los dos presidentes, señala Búsqueda, explica que la falta de acuerdo entre ambos equipos fue tal que las dos transiciones Vázquez-Mujica padecieron una especie de síndrome del Bing-Bang: “cada uno que llegó barrió con todo lo anterior”, ejemplifica Romani.
La “delicada” situación financiera del país, señala Búsqueda, llevó a Vázquez decidiera entonces quitar prioridad a varios proyectos apoyados por Mujica, como las construcciones de un puerto de agua profundas en Rocha, la regasificadora sobre el Río de la Plata y el Antel Arena.
Foto: Presidencia
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